Para la reducción de la pobreza, la gestión de los riesgos del cambio climático, la inseguridad alimentaria, la escasez de agua y la migración reviste una importancia particular. Estos riesgos afectan a todos los países y niveles de desarrollo y tienen un impacto global que a menudo sobrepasa las fronteras. Los pobres están especialmente expuestos a este tipo de riesgos, a pesar de que la mayoría de veces no han sido ellos los causantes de los problemas globales que han dado lugar a esta situación. Por consiguiente, la cooperación internacional tiene el deber de mitigar las consecuencias negativas de dichos problemas en los países pobres.
Esta labor, además de llevarse a cabo mediante los instrumentos bilaterales y multilaterales de la cooperación internacional suiza utilizados hasta la fecha, se realiza a través de los programas globales de la COSUDE sobre determinados temas de importancia mundial.