23 de agosto de 2024.- La metodología peruana para la gestión de riesgos que afecta la integridad pública fue aplicada en un taller por los servidores públicos de las diferentes unidades ejecutoras del Gobierno Regional de Lambayeque.

El “Taller de aplicación metodológica para la gestión de riesgos de la corrupción» organizado por la Gerencia General del GORE Lambayeque, estuvo a cargo del especialista senior en Prevención de la Corrupción, Aldo Bautista Echazú, representante del Programa GFP Subnacional de la Cooperación Económica de Suiza – SECO implementado por el Basel Institute on Governance.

El ponente destacó la generación de estos espacios para que sean los mismos trabajadores que intervienen en los procesos, quienes puedan identificar los riesgos de la corrupción a fin de tomar medidas y contrarrestarla de manera participativa.

Aclaró que el Sistema de Control Interno (SCI) no se trata de la Contraloría sino del autocontrol, autogestión y autoregulación que el trabajador se hace a sí mismo para mejorar y promover el logro de resultados, eficiencia y eficacia. No hay proceso de mejora si no hay componente de gestión de riesgo, un diagnóstico, y un plan para superar el diagnóstico.

Recordó que el resultado de la gestión pública es el impacto que se causa en el ciudadano, más aún cuando éste desconfía por los altos niveles de percepción de corrupción, situación que se debe revertir. Reveló que la metodología peruana para la gestión de riesgo de la corrupción es utilizada también en países como Ecuador y Bolivia.

Previamente, el gerente general del GORE Lambayeque, Ranjiro Nakano Osores, precisó que la cultura, la moral y la ley son tres pilares para abordar la gestión de riesgo de la corrupción. Invocó a los trabajadores actuar con ética y los valores de justicia, responsabilidad, honestidad y puntualidad, y defender a la institución.

A su turno, el jefe de la Oficina Regional de Integridad Institucional, Giovanni Milla Risco, pidió no caer en el facilismo y nombrar a la corrupción con nombre y apellido, evitando generalizar a toda la institución. Remarcó que la corrupción se puede combatir con la identificación de los riesgos y los alentó a no desmayar en esa lucha, señalando que por más grande que esta parezca, “David venció a Goliat”, tomando esta figura bíblica.