El sector construcción tiene un gran potencial para contribuir a la mitigación y adaptación al cambio climático y mejorar la calidad de vida de las personas. Actualmente, el sector es responsable de casi el 40% de las emisiones de CO₂ en todo el mundo y se espera que esta cifra aumente.
Los edificios modelo (showcases) del proyecto CEELA son viviendas sociales e instituciones educativas que incorporan principios de eficiencia energética, energías renovables y altos estándares de confort. Los edificios modelo están situados en zonas de clima cálido en cuatro (4) países: México, Perú, Colombia y Ecuador.
Existe una correlación entre la temperatura de un aula y el rendimiento de los alumnos. Si la temperatura de una escuela en zonas de clima cálido puede reducirse a menos de 30 grados, el rendimiento de los alumnos mejorará notablemente. Esta es la principal razón por la que nos centramos en las infraestructuras escolares. Una escuela con buenos niveles de confort contribuye a mejorar el aprendizaje de los jóvenes.
La meta de todos los edificios modelo es alcanzar los siguientes tres (3) objetivos: a) mostrar cómo se puede aumentar el confort en las escuelas y las viviendas sociales; b) determinar qué tecnologías pueden lograr la autogeneración de electricidad y aire acondicionado a partir de energías renovables y eficiencia energética, y c) cómo se pueden reducir las emisiones de CO2 en los edificios a lo largo de su ciclo de vida.
Como parte del proyecto CEELA, durante el Design Charrette (taller de diseño) se han definido 15 principios de Eficiencia Energética y Confort Adaptativo (EECA) que han sido incluidos en los edificios modelo. El Design Charrette es un taller intensivo de tres días en el que arquitectos e ingenieros trabajan juntos para evaluar un proyecto de construcción desde el punto de vista de los 15 principios CEELA. Este proceso ha demostrado ser un ejercicio exitoso para integrar las diferentes visiones de los actores clave, concertando un enfoque general para incrementar la eficiencia energética, la energía renovable y el confort en el edificio.
El primer proyecto que se analizó con esta metodología fue el complejo residencial DAMMAR, un proyecto de vivienda social situado en la ciudad de Cartagena, Colombia (Showcase de Colombia). DAMMAR cuenta con 352 viviendas. Ha considerado la ventilación natural y el control de la radiación solar directa, dado que Cartagena es una de las zonas con mayor radiación solar de Colombia. Se tiene previsto la entrega de las primeras unidades para noviembre de 2023.
El segundo proyecto fue el conjunto residencial Aldea Tulum en México; un proyecto de vivienda social ubicado en la ciudad de Tulum, Estado de Quintana Roo (Showcase de México). Aldea Tulum contará con 8,052 viviendas, que se construirán en seis etapas. Las etapas 1 y 2 están parcialmente terminadas. La etapa 3 implementará las estrategias de Eficiencia Energética y Confort Adaptativo del CEELA. La construcción de la etapa 3 comenzó en enero de 2022. Para el proyecto piloto se eligió un edificio de cuatro plantas con dos apartamentos de 49 m2. El proyecto implementó varias estrategias de eficiencia energética como el aislamiento térmico en las paredes mediante el relleno de perlita en los huecos de las paredes de bloque, un ventilador de techo en el salón, ventilación natural e iluminación eficiente.
El tercer proyecto analizado fue la Escuela Pública Moisés Rebata, situada en Nazca, Perú (ver video). El proceso contó con la participación de 30 profesionales del equipo CEELA.
El cuarto proyecto fue la Universidad del Azuay, ubicada en la ciudad de Cuenca, Ecuador. Consideró cinco de los principios del CEELA: Control de la radiación solar directa, aislamiento térmico incorporado, diseño bioclimático de los espacios exteriores, autogeneración de energía eléctrica renovable y un sistema de monitoreo (Universidad de Azuay – Proyecto CEELA).
Todos los edificios modelo serán monitoreados después de la etapa de construcción, donde se medirá y analizará la eficiencia, la energía renovable y el confort de cada proyecto.
Con base al objetivo principal, se propuso un plan de monitoreo que considera:
- Un sistema de monitoreo físico basado en sensores de parámetros ambientales y energéticos, almacenamiento de datos y visualización.
- Un sistema de levantamiento de información (encuestas de satisfacción), para que los usuarios proporcionen información sobre el rendimiento térmico y energético de las viviendas, con relación a las condiciones de confort y los beneficios socioeconómicos.
- Un sistema de evaluación de datos, que procese los datos provenientes de las encuestas, las facturas eléctricas y el sistema de monitoreo de parámetros ambientales.
En el caso del edificio modelo de Ecuador, la Universidad del Azuay incorporó un sistema de monitoreo constante en las aulas y laboratorios para medir la temperatura, el CO2 y la humedad relativa. Además, se realizaron encuestas de satisfacción a los estudiantes. Los resultados del monitoreo de las medidas implementadas en este showcase estarán listos en diciembre de 2022.
Autores: Roger Walther y Johana Infante, EBP.
El artículo ha sido publicado en la Plataforma de Conocimiento SDC Climate Change & Environment Network
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