Los conocimientos, la información y las pruebas científicas sobre el tiempo, el agua y el clima son cada vez más necesarios para responder a los retos y oportunidades que presenta el cambio climático. Esto es esencial para apoyar la toma de decisiones específicas, diseñar acciones de adaptación, reducir las vulnerabilidades y aumentar la resiliencia de los habitantes y de los sistemas socio ecológicos frente a los crecientes riesgos hidroclimáticos.

Los Andes son especialmente vulnerables a los fenómenos meteorológicos extremos y a la variabilidad y el cambio climático. Actualmente, el proceso de coproducción y difusión de los conocimientos, la información y los servicios específicos de la Organización Meteorológica Mundial – OMM es deficiente entre las instituciones regionales responsables y a lo largo de la cadena de valor, por diversas razones como la escasa capacidad institucional y/o la falta de recursos adecuados.

En este sentido, se hace necesario aumentar la cooperación regional en materia de modelización del clima y mejorar las capacidades de interpretación y predicción para garantizar que los responsables de la toma de decisiones puedan acceder a tiempo a la información y los servicios esenciales.